31/12/14

Otra vuelta de tuerca.

Cerramos el año con poco de lo que sentirnos satisfechos. Pese a quien dice lo contrario, con todos sabemos qué intenciones, las cosas no van bien, ni llevan trazas de mejorar de forma visible para la mayoría, ya sabemos que para cuatro las cosas están fantásticamente bien, como siempre, para cuatro.
Pero así como el año 2014 termina con una noticia triste, injusta e indignante, el año 2015 comenzará con la misma pésima noticia: la entrada en vigor de una Norma que viene a prohibir de facto, aunque se haga mediante la aplicación de tasas y sanciones millonarias, el uso de la información libremente, el uso de enlaces o links que permitían multiplicar el impacto de noticias e informaciones por toda la Red.
Alguien tuvo la genial idea de ponerle puertas, y tasas, a la libre circulación de la información. Que no es afán recaudatorio, nos dirán, pues entonces queda lo que queda: pura inquisición medieval en el siglo XXI. Censura pura y dura, limitaciones de libertades por todos lados, de expresión, de comunicación, de reunión, de manifestación... Dice Gran Wyoming en su libro "No estamos solos", que no estamos solos frente al lado oscuro y, seguramente tiene razón pero estamos, eso sí, poco o mal acompañados.

Feliz Navidad/