26/12/13

La extraña familia del dictador

En el enlace arriba pegado podréis ver el origen del comentario, la anunciada celebración de la boda de una descendiente del dictador en el Pazo de Doña Emilia Pardo Bazán, del que se apoderó (se lo hizo regalar), y que la Junta de Galizia recalama como patrimonio público.
 
Cuanta razón tiene Sopena sobre la inexplicable inmunidad del nefasto dictador y su repulsiva familia. Hay jueces estrella que miran para otro lado- como muchos- para que el hedor no les afecte, reclaman a Pinochet, o a los "milicos" argentinos pero no barren la basura doméstica de los crímenes franquistas.
La dichosa prole de dudoso origen- ¿nadie recuerda el run-run de que la única hija del enano materife no era suya?- no ha dejado de manifestar su moral o inmoral forma de vida, pero perdieron el miedo inicial a ser perseguidos por la la Ley, tras sacar del país todo cuanto pudieron (documentos, efectivo, joyas, objetos del Patrimonio Nacional, etc.) (en alguna ocasión fueron descubiertos en Barajas pero ahí quedó todo) para asegurarse la fastuosidad de una vida fácil y de eterno descanso en ésta, no en la otra que igual no es cierta.
Ya que no se les ha aplicado la Ley de vagos y maleantes, creada por su supuesto antecesor, y que les vendría al pelo, al menos deberían haber desaparecido en la oscuridad del anonimato y no venir de tanto en tanto a recordarnos que siguen ahí, como una estirpe ponzoñosa, envenenada de soberbia, cinismo e impunidad.
Y a los que siguen adorando al sangriento dictador tan sólo les deseo que sea cierto lo que pregonan sus "creencias", que existe el infierno, y que se pudran en él por la hipotética eternidad. Amén.

Uno que se va...

Un año que se va- 2.013-, que huye asustado de sí mismo, dejando atrás datos que le harán pasar a la historia como un hito a partir del cual este país retrocedió en lo económico, en lo cultural y en lo social, dramáticamente, más de cincuenta años. Para los que aseguran que no investigamos que sepan que hemos descubierto el viaje en el tiempo, hacia atrás, claro. 
Pasamos de destacar, a nivel mundial, por leyes como las de la dependencia, las de protección a la mujer y contra la violencia de género, las ayudas a la maternidad, la ley de plazos para la interrupción del embarazo, la potenciación de las energías renovables (llegamos a ser los primeros en eólica y solar), el incremento máximo alcanzado en inversión en I+D+i, en infraestructuras, en becas... a ocupar puestos por detrás de países del Este, o africanos. Hemos perdido derechos y prestaciones tan rápidamente que parece que nunca las hubiésemos disfrutado.
Y se nos viene encima un nuevo año- 2.014- que de entrada amenaza con subidas de la energía (electricidad y gas) insostenibles e injustificadas, sin que esas constantes subidas controlen el incremento de la "deuda" con las eléctricas que, de repente, nos dicen ha pasado de 20 mil a 30 mil millones, ¡casi ná! 
Un año que nos llevará a la "consulta" catalana, con la pregunta envenenada: ¿nos quedamos o nos vamos? Gane la que gane no habrá resuelto nada, sólo será el principio de un merder al que nos llevan cuatro jefes de aldea, no llegan ni a reyezuelos.
Comenzará el año con casi dos millones más de parados que cuando llegó Rajoy al poder y con la amenaza vertida en sus últimas intervenciones de que faltan reformas, como un mayor ajuste en lo laboral (más recortes) y un tratamiento más "razonable" de las pensiones- Podemos imaginar qué significa "razonable" para él; pérdida de derechos y disminución sustancial del poder adquisitivo de los yayos, soporte actual de muchas familias con todos sus miembros en paro.
Seamos positivos y confíemos en que eso en lo que casi nadie cree se producirá: una reactivación económica, una milagrosa recirculación del dinero, de la financiación, que de nuevo las empresas podrán contratar y generar una estabilidad económica que tanto estamos necesitando en la micro economía, que la otra, la macro, se las arregla para pescar en aguas revuelta.
Feliz año, es más que un deseo, es una exigencia.